Tratamiento de la intoxicación digitálica.
Bases para el uso de los anticuerpos antidigital.
Nogué S. col. Emergencias 2012; 24: 462-475
"La intoxicación digitálica, sobre todo asociada a un tratamiento crónico con este fármaco, es un motivo recurrente de consulta a los servicios de urgencias españoles. La intoxicación aguda es excepcional y podría presentarse tanto en una tentativa de suicidio como por la ingesta de plantas presentes en nuestro medio y que contienen glucósidos digitálicos. La insuficiencia renal, al modificar la cinética de la digoxina, es un importante factor precipitante de reacciones adversas y graves a este medicamento. Las manifestaciones clínicas son inespecíficas, y predominan las digestivas (náuseas, vómitos, diarreas, dolor abdominal) y circulatorios (inestabilidad, mareos, síncope, lipotimia). Las bradiarritmias (fibrilación auricular lenta, bloqueos de conducción) son frecuentes y pueden acabar en asistolia. Las taquiarritmias podrían conducir a la fibrilación ventricular. En las intoxicaciones agudas, la hiperpotasemia es un factor de riesgo de parada cardiaca. La concentración plasmática de digoxina permite evaluar la gravedad de una intoxicación, siempre y cuando se haya alcanzado el equilibrio de distribución entre las concentraciones plasmáticas y tisulares. El tratamiento de la intoxicación aguda precisa la administración de carbón activado en las primeras horas tras la ingesta. En las intoxicaciones agudas o por tratamiento crónico, es necesaria la monitorización electrocardiográfica continua y normalizar, en caso necesario, las concentraciones de potasio y magnesio. Las bradiarritmias se tratan con atropina como fármaco de primera elección y las arritmias ventriculares con fenitoína o lidocaína. Las situaciones de riesgo vital requieren el uso de anticuerpos antidigital, y se recomienda la disponibilidad de este antídoto en los hospitales considerados de referencia o alta tecnología, el cual deberá dosificarse en función de la carga corporal total de digoxina."